Una novena es simplemente una oración que se reza a lo largo de nueve días (en ocasiones, también en nueve horas, nueve meses, etc.). En general se hacen con una intención particular o parar orar por un difunto. Como nos atestigua la tradición, es una forma de oración que agrada especialmente a Dios, quien se complace en derramar gracias abundantes mediante este instrumento.
Es muy aconsejable la confesión y la comunión durante la novena.
Aprovecha para pedir a Dios lo que quieras. ¿Qué padre de vosotros, si el hijo le pide pan, le dará una piedra? (Lc 11:11). Ahora bien, evita caer en negociaciones con Dios o en supersticiones. Pide a Dios lo que quieras, pero solo si ha de ser para mayor honra y gloria de Dios y bien de tu alma.
Si eliges una novena que pide la intercesión de un santo, busca imitar sus virtudes y santidad. Por este motivo, hemos incluido una breve biografía de cada santo al inicio de cada novena.